Tienes un objetivo claro: lucir un rostro healthy e impoluto. Según un estudio de Max Factor las tres imperfecciones que más traen de cabeza al género femenino son: las ojeras, las consecuencias del acné o las manchitas más oscuras por un exceso de pigmentación. Sin embargo, cuando sacas tu corrector no siempre consigues el efecto deseado.
¿Por qué? Ya que no hay dos imperfecciones iguales, no puedes pretender que el resultado de una única fórmula tenga un resultado similar.Teoría del color.Siguiendo las enseñanzas del propio Mr. Max Factor, la clave está en basarse en la Teoría del Color la cual dice que los colores del círculo cromático se neutralizan con su opuesto o complementario. En temas de piel lo podemos resumir en que cada imperfección de la piel hay que camuflarla con el tono adecuado.
Guía de tonos:
-Rojeces: El color perfecto para camuflarlas es el verde. Sí, sí aunque no lo parezca, ambos tonos se mezclan y se neutralizan. Así que si tienes problemillas con acné este es tu salvador.
-Piel cetrina: ¿Tu dermis se muestra apagada y amarillenta? El aliado perfecto será un corrector lila que acaba con la opacidad.
-Ojeras: Las imperfecciones moradas tienen solución con un stick en tonos amarillos ya que dan un plus de luminosidad al rostro.
-Manchas oscuras: Si tienes la piel muy clarita opta por una fórmula rosa o, si estás más bronceada, hazte con un producto melocotón. Consiguen camuflar venitas, pecas o signos de hiperpigmentación. Si es una producto cremoso también aportarás brillo.
-Iluminador: La clave es que tenga partículas que reflejen la luz. Así, ganarás un extra de luz al instante.
