Si el mundo de la belleza es maravilloso y peligroso a partes iguales, del tema de las cejas ya mejor ni hablamos... Tienes que estudiar el diseño que mejor le sienta a tu rostro, tener cuidado para no sean demasiado finas (no vaya a parecer que acabas de aterrizar de los años 90) y, por supuesto, tener el pulso propio de un cirujano, ¡que ya sabemos que las pinzas de depilar las carga el diablo!
Aunque eso sí, si no estás satisfecha con las cejas que tu esteticista (o la madre naturaleza) te ha dado, tienes varias alternativas para solucionar tu 'beauty-drama'. Lápices, pigmentos, plantillas para cejas, la técnica del 'microblading'... y atención: CEJAS POSTIZAS.
Vale, sabemos que probablemente la primera imagen que te ha venido a la cabeza ha sido la de una especie de bigote falso que se despega en el momento menos esperado... Pero créenos, parecen tan reales y el resultado es tan natural, que Instagram ya ha caído rendido a ellas.
Eso sí, a partir de ahora dudarás hasta de la veracidad de las cejas de la mismísima Cara Delevingne.
Cuando era pequeña le robaba la revista Cosmopolitan a su hermana mayor para leerla a escondidas, ahora trabaja aquí mientras escucha a Taylor Swift en modo bucle.
