La piel del rostro es más finita y más delicada que la del cuerpo. Además, está más expuesta y sufre con intensidad cualquier agresión externa. Por ello, los expertos de Veet aseguran que los hábitos de depilación facial deben ser adaptados a sus peculiaridades. Leticia Carrera, directora técnica de los centros de belleza Felicidad Carrera, afirma que: "La cera supone un buen método para depilar labio superior, barbilla y cejas (…) ya que podremos retirar de un único tirón los pelitos no deseados". ¿Quieres un resultado de salón sin salir de tu cuarto de baño? Sigue los consejos de la experta.

1. Prepara la piel
Una semana antes utiliza un exfoliante suave sobre la zona para retirar las células muertas. El día elegido limpia perfectamente la piel para acabar con cualquier resto de maquillaje. ¡Ah! Fíjate que la piel esté hidratada (sin descamaciones, heridas, irritaciones o dermatitis) y sin una gota de agua en su superficie antes de aplicar la cera.

2. Elige tu fórmula adecuada
La cera tibia está recomendada porque arranca fácilmente el vello (abre los poros) sin peligro de quemar la zona. Eso sí, antes de utilizarla, comprueba cómo reacciona tu dermis haciendo una prueba en un trocito pequeño de la piel.

3. Selecciona el momento
Aunque no lo creas, influye. ¿La recomendación de la profesional? Mejor por la noche y después de una ducha. Los poros estarán más dilatados y el vello saldrá con facilidad. También puedes aprovechar las horas de sueño para que tu piel se calme y desaparezcan las rojeces.

4. Sigue las pautas específicas de cada zona
Para las cejas, empieza determinando su diseño. Marca el principio colocando un lápiz en vertical a la altura de la nariz, y el final señálalo con una línea que vaya desde la aleta de la nariz hasta la esquina externa del ojo. Si vas a depilar el labio superior, retira independientemente cada lado (izquierdo y derecho).

5. Mima tu piel
Una vez has eliminado el vello, utiliza productos hidratantes que no contengan perfumes ni alcohol. ¿Un ejemplo? El aloe vera es perfecto para calmar irritaciones hasta en las pieles más sensibles.

6. Protégete del sol
Necesitas al menos un día para que la dermis se recupere. En esas 24 horas no tomes el sol ni te zambullas en el agua (el cloro y la sal pueden afectarla). ¿Tienes que salir de casa? No lo hagas sin aplicar un protector solar específico para el rostro con un SPF alto.

7. Respeta los tiempos
Normalmente el vello tarda en volver a salir de tres a cuatro semanas. Si necesitas retirarlo con mayor frecuencia, espera al menos 72 horas entre sesión y sesión para que el cutis se recupere.

8. Recuerda que la depilación es tu aliada
Si siempre eliminas los pelos de raíz, conseguirás que poco a poco se vayan debilitando. Saldrán menos densos y más finos.

9. Cuidado al retirar la cera
En las zonas próximas al párpado, debes tensar suavemente la piel antes de retirar la cera para evitar dañar las fibras (tanto de colágeno como de elastina) y provocar el descolgamiento de la piel.

10. No te olvides de las pinzas
Son perfectas para retocar o acabar con algunos pelitos sueltos.