Seguro que más de una vez has visto como se han encendido las luces del Real, que dan el inicio a la feria de abril de Sevilla, desde el televisor de tu casa en la comodidad de tu sofá. Pero si este año te has atrevido a vivir la fiesta en primera persona, ten en cuenta una serie de consejos para disfrutar de la feria sin quedar como una novata. 

Para empezar con buen pie y entrar en materia: abre tu Spotify y teclea 'música feria'. Empieza a escuchar 'A bailar', 'Amigos para siempre' o 'Ni más ni menos', clásicos que sonarán a todas horas.

Entérate de todas las acciones especiales que se llevan durante esa semana, como la colaboración que ha hecho Ron Barceló junto al ilustrador gaditano Pedro Perles. Han sacado una botella de edición limitada cuyo estampado está inspirado en la Feria.

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Vístete con el 'dress code adecuado'. Si quieres meterte de lleno en la fiesta, alquila un vestido de flamenca. Cada año se renuevan y hay infinidad de diseños, así que no te tienes que preocupar por encontrarte a otra con el mismo que tú. Pero si que tienes que tener en cuenta cómo llevarlo: el mantón debe caer sobre los hombros y la flor no va en la nuca o sujeta bajo la oreja, la manera correcta es encima de la cabeza.

En el caso de que prefieras vestir con tu propio estilo, esta temporada las tendencias van de la mano con la inspiración flamenca. Volantes, lunares o flecos están triunfando en las tiendas, ¡pero ten cuidado! No te lo pongas todo a la misma vez, no quieras acabar pareciendo un farolillo más del recinto con tanto volumen y colorido. 

Deleítate con la amplia oferta gastronómica. Desde el tradicional 'pescaíto' frito al 'rebujito' o la manzanilla.

Visita, a pie o en calesa, las 1040 casetas. Este año 18 son de acceso público, que se extienden a lo largo de la Maestranza. Alucina con la encendida de luces del famoso alumbrado del recinto o móntate en una de las atracciones que se encuentran en la calle del Infierno.

La Feria de Sevilla es sólo el comienzo de una de las principales fiestas andaluzas después de la Semana Santa. Si aún te quedan fuerzas, puedes darte una vuelta por las que se celebran en Córdoba, Jerez y Málaga.