De nuevo aparece la contradicción absurda de opiniones en la industria de la moda. ¿Cómo se puede llamar "demasiado gorda" y "demasiado delgada" a una persona en el mismo día?

Esta noticia ya no es tan sorprente como la primera vez que lo vimos pero sí, ha vuelto a pasar, y esta vez le ha tocado a la modelo Karlie Kloss.

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A estos comentarios opuestos y sin sentido hechos por distintos agentes de casting se tuvo que enfretar la modelo en una misma jornada de trabajo.

En el festival Cannes Lions, la top contó esta experiencia que vivió,y se convirtió en la gran protagonista del evento por sus reivindicaciones . Karlie quiso aclarar que entendía que la industria de la moda y los casting exigieran unos requisitos, y si no se cumplían no te seleccionaban. Pero lo que no entendía era el cambio de "catalogar" su peso y sus medidas de forma completamente diferente (no fue seleccionada en una prueba "por estar demasiado gorda" y en otra prueba "por estar demasiado delgada").

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A cualquiera que le ocurra esto puede llegar a tener un pensamiento peligroso sobre sí misma y no sentirse cómoda con su cuerpo. La modelo, con 57kg de peso y 1,85 de altura nos lo ha dejado claro: "No quiero gustarle a nadie más que a mi misma". Que más da lo que piensen los demás si tú te sientes feliz y a gusto con tu cuerpo.

Este pensamiento positivo nos tranquiliza y apoyamos a la modelo.

Todos los cuerpos son bonitos, no existe la perfección.