Algunos han encontrado el amor. Otras han tenido líos geniales. En general en estas aplicaciones hay de todo, pero el prototipo de chico que se encuentra poca dista de lo que una chica de características (normales) quiere en su vida. Diversión y conversación hay a tutiplén. Si lo que estás buscando es algo serio... Mejor ponte a leer las novelas de Jane Austen. El prototipo de hombre 2.0, después de unas semanas de experimento, ha sido este.
1. Pone la altura.
Sí señores, los tíos ponen lo que miden. Y eso que la altura media de la española es el 1.65. Pero sí, parece que resulta mucho más interesante saber, de primera, que el chico en cuestión mide 180 centímetros, o 192 o 174 si resulta ser de la media española. Para qué poner un poema de Neruda, una frase de El club de los poetas muertos o una descripción mínimamente más profunda. El chico 2.0 te dice que cuánto mide para que sepas, antes de hablar, si te vas a poder poner tacones con él. Qué considerado.
2. Son mucho más directos.
Cómo se nota que no estamos face to face... Y que todo es más fácil a través de una pantalla del teléfono. "Del hola, ¿qué tal?" -si tienes la suerte de que pone ambas interrogaciones, la tilde, y el hola con h- casi viene el "dame tu teléfono que es que esto no lo suelo usar". Perdona, pero la que no lo usa porque va a escribir un artículo soy yo. Las excusas para conseguir el teléfono son de lo más variopintas y te hace darte cuenta de que cuando nos dicen que los hombres son más sencillos... Es completamente real.
3. Pero también son mucho más tímidos.
Yo pensaba que si había crush, o match, o como se llame... La conversación iba a fluir. Pero no. La acumulación de crushes, matches, o lo que sea, se acumulan en "Mensajes" sin saber muy bien por qué. Si ha habido crush, match o lo que sea... ¿Por qué no me hablas? Es un misterio todavía sin resolver... Aunque no he hecho la prueba de hablar yo. Hay que recordar que esto es un experimento.
4. Un porcentaje muy alto de las fotografías son sin camiseta.
Claro que sí. Nosotras preferimos contar los cuadraditos de la tableta de chocolate a saber si te has leído el Lazarillo de Tormes. O a si estudias o trabajas. Saber que estás cachas y que te matas en el gimnasio es lo que más nos interesa. Quizás es la finalidad de este tipo de red sociales que aun yo no he podido captar... (¿Hace falta recalcar que esto era un experimento?).
5. Todos son unos viajeros incansables.
¿Que han estado en Tailandia? Foto. ¿Que han estado en Oporto? Foto. ¿Que han estado en Machu Pichu? Foto. ¿Que han estado en el Polo Sur? Doble foto. La cantidad de viajeros incansables que hay en estas redes sociales es casi mayor a los cropped tops que puedes encontrar normalmente en Bershka. Todos han hecho unos viajes increíbles... No sabemos si porque les gusta viajar o porque tenían que hacerse con una buena foto de perfil. Los buscadores de viajes de Internet deben estar encantados.
6. Todos hacen muchísimo deporte.
Pero es que no es que hagan muchísimo deporte... Es que hacen surf, kite surf, paddle surf y todos estos deportes exóticos. No vale el fútbol, el tenis, el baloncesto, el balonmano, el bádminton... Tienen que ser deportes acuáticos en los que lucir palmito y que sean la excusa ideal para que les preguntes... "¿Eres surfero?".
7. Los que tienen barco, te lo hacen saber.
Porque ojo, un barco es un barco. Un barco suma puntos. Un barco es uno de los mejores escenarios veraniegos para tus fotos de Instagram. Un barco no lo tiene todo el mundo y ellos tienen que decirlo por fotografías. Porque una imagen vale más que mil palabras.
8. Muchos salen con una copa en la mano.
Un gin tonic, una copa de champagne, una caña, un Rioja... Lo importante es tener algo en la mano. Lo importante es posar en esa imagen en la que te juegas el crush, el match o lo que sea, con una mirada penetrante, una sonrisa burlona y la copa al frente. Como Leonardo Di Caprio en El Gran Gatsby. Porque sois unos bon vivant y eso tiene que quedar recalcado. Hay un alto porcentaje de posibilidades de que te proponga tomar una copa, un vino o un gin tonic.
9. Un 90% tienen barba.
¿Hacen un casting? ¿Por qué todos llevan barba? ¿Es eso cierto de que la barba es el maquillaje de los tíos? ¿Les da pereza afeitarse? ¿La barba se lleva?
10. Hay de todo.
Hay de todo en la viña del Señor, e igual que hay cachas de discoteca, tíos que solo quieren lo que quieren y gente que no liga desde la Movida Madrileña, también hay gente normal. Conozco casos de gente que se ha conocido a través de esta app y que están a punto de casarse, novios que llevan más de un año y que del móvil ha surgido una bonita relación o amigas que me han contado que han tenido historias divertidas. Como en la vida real, están los que no te hablan nunca, los que te agregan a Instagram, los que te dan a like aunque no hables con ellos, los que insisten aunque ya no te metas más, los que dicen estupideces o los normales con los que incluso, podrías quedar a tomar un café. La vida 2.0 poco se distingue de la vida real... Si vives en la vida real. Si eres de la que cree en el amor para toda la vida, en los príncipes azules y en las relaciones perfectas estas aplicaciones no son lo tuyo. Yo aun estoy decidiendo de qué bando soy. La conclusión es que la aplicación, hecho el experimento, ha sido borrada de mi móvil...
Paloma Herce es periodista y publicista, experta en moda, estilo de vida y todo lo que tenga que ver con ser una bon vivant desde hace 10 años. Graduada en Periodismo y Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad CEU San Pablo, ha estudiado el Máster de Radio de la Cadena COPE y el curso de Estilismo y Personal Shopper de Condé Nast College. Empezó escribiendo de moda, de verdad, en Harper’s Bazaar, y después ha continuado en revistas como Cosmopolitan o TELVA. Tiene una newsletter que utiliza a modo de diario y un consultorio de invitadas en el que da tips sobre elegancia. Su filosofía de vida, y de trabajo, se basa en una frase de Diana Vreeland que dice ‘the eye has to travel’. Y ella lo hace viajando, leyendo, viendo películas y disfrutando de exposiciones
