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El furor por Barbie ha llegado tan lejos que no sólo ha invadido nuestros armarios, sino que también se ha hecho con nuestras rutinas de belleza. El procedimiento tradicionalmente conocido como ‘traptox’ ahora se denomina Barbie Bótox y se ha convertido en el más aclamado del momento a causa de TikTok, que ha disparado el interés por este aliado ‘beauty’ a raíz del éxito de la película de Greta Gerwig. Contra todo pronóstico, no es la cara de Barbie la que persigue este procedimiento, sino que se trata de inyectar bótox en los trapecios. Lo habitual es que se necesiten son alrededor de 40 a 80 aplicaciones para alcanzar la silueta de Barbie.
Con este procedimiento se consigue un aspecto más esbelto del tren superior, algo que persiguen muchas mujeres, tal y como ha quedado patente ante el interés que el denominado Barbie Bótox esta generando en las redes sociales. En realidad, esta técnica lleva años siendo empleada en las consultas estéticas, aunque en la mayoría de casos sus objetivos eran medicinales. “Llevo tiempo inyectándose bótox ahí para mermar el dolor de mis hombros y de la parte inferior de la espalda, pero no me había dado cuenta de que estas inyecciones ayudan también lograr un aspecto más esbelto hasta un mes después de hacerlo”, confiesa una usuaria que firma a Isabelle Lux, que ha subido a su TikTok un vídeo en el que desvela los resultados logrados al mes de las inyecciones.
Como no podía ser de otra forma, este procedimiento está rodeado de controversia, pues hay quienes aseguran que se trata de un procedimiento peligroso, algo que Virtudes Ruiz y María Vicente, cirujanas y médicos estéticos con consultas en Lorca y Murcia, niegan siempre y cuando se haga bajo el control de un médico experto con control de la anatomía, la técnica y el manejo del producto. “Es vital que te explique muy bien los pros y los contras que puede tener este tratamiento de relajación temporal de la musculatura que afecta al cuello, la escápula (movimientos de rotación del hombro y el cuello ) y la espalda”, señala. “No es irresponsable e inseguro teniendo en cuenta que se está hablando de un medicamento que, siguiendo pautas, no hay problema de usarlo”, aclaran a ‘Cosmopolitan’ el equipo médico de INOUT. “Hay que tener en cuenta los antecedentes del paciente, que sea un paciente apto para hacer el tratamiento teniendo en cuenta alergias u otros problemas incompatibles con el producto y por supuesto, que el profesional conozca la técnica. También es básico que el paciente tenga toda la información del pre y del post tratamiento”, aseguran.
“Me hice el procedimiento porque siempre he tenido mucha tensión, rigidez y dolor en los hombros, en el cuello y en la parte superior de la espalda. Sin embargo, he de admitir que lo hice tanto por vanidad, al haberlo probado como parte de mi preparatorio antes de mi boda, como para mejorar en términos de salud”, confiesa Lux, que asegura sentirse más ligera y esbelta desde haber probado el Barbie Bótox. “Con este tratamiento conseguimos la relajación temporal de la musculatura que tratamos con toxina botulínica. En la mayoría de las ocasiones se realiza para tratamientos de contracturas que causan dolor. En el caso de realizarlo para tratamiento estético que aporta la sensación óptica de alargamiento del cuello, tienes que tener en cuenta que la musculatura de la región del cuello, la espalda y la escápula estará relajada. Por ello, en caso de movimientos bruscos del cuello o del hombro, puedes tener alguna lesión no deseada en estas zonas, por falta de fuerza muscular”, dicen Virtudes Ruiz y María Vicente.
Por su parte el equipo de INOUT señala que a causa del furor desencadenado en las redes sociales, la gente comienza a preguntar por este tratamiento, aunque en nuestro país todavía el reflejo es limitado. Así nos lo hacen saber Virtudes Ruiz y María Vicente, cirujanas y médicos estéticos. “En Corea y Estados Unidos se realizan este tipo de tratamientos desde hace tiempo. En España es menos habitual realizarlo como tratamiento estético para alargamiento de cuello. De momento, parece que es más una tendencia extendida por los usuarios de TikTok que aquí aun no ha trascendido, porque son los más jovenes los que están obsesionados con este tipo de tratamientos que podemos llamar "de moda”. Sin embargo, la mayoría no tiene la posibilidad de poder pagar su precio, que suele ser elevado si acuden a un centro médico especializado y legal, tal y como hay que hacer”, dicen.
¿Complejo? de hombros y visibilización de los retoques
Al relajar los músculos el bótox, se rebaja el aspecto más voluminoso de los músculos, logrando así que el cuello parezca más alargado. Lo que antes se conocía como “cuello de cisne”, en definitiva, ahora es “cuello de Barbie”. El auge de este tratamiento demuestra también que hay mujeres a las que el volumen de sus hombros les acompleja. De hecho, el verano pasado Kim Kardashian subió a sus redes una imagen en la piscina que desencadenó las burlas de muchos usuarios, que aseguraron que la empresaria y socialité había empleado de forma torpe Photoshop para que sus hombros parecieran más menudos y su cuello más alargado. “Kim Kardashian es conocida por pasar sus trapecios por Photoshop para que parezca que su cuello es más alargado y esbelto. Al hacer zoom en la foto, te das cuenta de que ha habido edición. Ha empleado la herramienta de licuar de Photoshop”, explica la ‘tiktoker’ Caroline In The City en su perfil.
Lo que podemos ver como positivo es que cada vez son más quienes hablan abiertamente de los procedimientos a los que se someten en aras de la belleza, pues hasta hace bien poco, era bien habitual que las celebridades, y por supuesto las personas anónimas, lo llevaran en secreto. Lo importante es, en cualquier caso, tener en cuenta que las tendencias que se imponen en redes sociales no son aptas para todo el mundo, por lo que es vital no dejarse llevar por modas cuando hablamos de procedimientos estéticos. Según la SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética), siguiendo sus últimas encuestas, el 10,5 % de los pacientes acude a un cirujano influido por las redes sociales, y por eso resulta esencial tener cuidado con la excesiva normalización e incluso romantización que en ocasiones rodea a los procedimientos estéticos. “Son tratamientos que necesitan respeto. Lo que queremos conseguir son objetivos realistas”, dice para terminar el Dr. Richard Fakin.
El mundo real no es ‘Barbieland’ y por ello, hay que ser siempre precavidos a la hora de someternos a cualquier procedimiento por más que las redes sociales se encarguen de popularizarlo.
Marita Alonso es experta en cultura pop y estilo de vida. Escribe acerca de fenómenos culturales desde una mirada feminista en la que la reflexión está siempre presente. No tiene miedo de darle una pincelada de humor a las tendencias que nos rodean e intenta que el lector ría y reflexione a partes iguales. Cuando escribe sobre relaciones, su objetivo es que la toxicidad desaparezca y que las parejas sean tan saludables como las recetas que intenta cocinar... Con dramáticos resultados, claro. Los fogones no son lo suyo.
Ha publicado dos libros ("Antimanual de autodestrucción amorosa" y "Si echas de menos el principio, vuelve a empezar") y colabora en diversos medios y programas de radio y televisión luchando por ver las cosas siempre de una manera diferente. Cree que la normalidad está sobrevalorada y por eso no teme buscar reacciones de sorpresa/shock mediante sus textos y/o declaraciones.
Licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense, imparte master classes de cultura pop, estilo de vida y moda en diversas universidades. En Cosmopolitan, analiza tendencias, noticias y fenómenos desde un prisma empoderador.
