Dicen que las segundas partes nunca fueron buenas, pero este trágico vaticinio parece no incomodar a Jennifer Lopez y Ben Affleck, actores que probablemente debido a su estatus de iconos del pop, millonarios y famosos bien podrían desmarcarse de este dicho popular que a todos nos han estrellado alguna vez en la cara. O al menos así lo están demostrando. Que no se nos malinterprete: no pretendemos romantizar la idea de volver con nuestros ex —dado que, en la mayoría de las ocasiones, no funcionaría—, pero sí buscamos romper una lanza a favor del hecho de que algunas personas cambian, maduran y, oye, parece que también valoran lo que ya no tienen consigo. Un valioso aprendizaje que Affleck ponía en práctica cuando a principios de este año se tiraba a la piscina y le proponía a su ex, Lopez, volver a verse después de casi dos décadas separados. Dos décadas donde ambos se casaron, tuvieron hijos y se reinventaron hasta ser dos personas completamente distintas. Todo para que después de todo se dieran cuenta de que lo único que anhelaban era la compañía del otro. Menudo año para estar vivas el 2021.
Por todo esto —y mucho más— es inevitable que al verlos juntos darse arrumacos en un acaudalado yate, hacer planes de futuro y hacerse sutiles guiños en su vestimenta al más puro estilo ‘teen’ pensemos: ¿cuál ha sido su fórmula mágica para convertir este segundo ‘round’ en algo más que una intentona? Y lo más importante, ¿podré yo emularnos con un amor del pasado y salir airosa? La respuesta para la primera pregunta es sin duda mucho más sencilla que la que atañe a la segunda cuestión.
‘Bennifer’, un romance aspiracional para las más nostálgicas
Lo de Jen y Ben parece una revancha mediática. Según se supo en su momento, allá por 2004, la cancelación de su boda se debió a la presión vivida por parte de los medios, responsables según los protagonistas de su desavenencia. Hoy, siendo mucho más famosos que por aquel entonces, vuelven a echarle un pulso a los titulares y paparazzis que descubren en su idilio a la gallina de los huevos de oro. Algo con lo que ahora parecen no sentirse del todo incómodos. De hecho, era la propia Lopez la que compartía una instantánea de ambos dándose un pasional morreo en Instagram. Sutil forma de comunicarnos que su miedo escénico como pareja ya está más que superado.
Llegados a este punto, todo parece claro ‘clarinete’. ‘Bennifer’ —como los fans los apodaban hace casi dos décadas— ha vuelto más fuerte que nunca, ha logrado redimirse de sus errores pasados y han perdido el miedo al fracaso. Si esto no es un ‘couple goal’ que vengan los Beckham y lo vean.
Periodista. Sé de buena tinta que la hermana gemela de Lindsay Lohan existió. Esta es mi historia, Patricia.
