Todas las comparaciones son odiosas, y el porno en la mayoría de las ocasiones crea falsas expectativas respecto a nosotras mismas y a nuestras parejas sexuales. Pero si eliminamos la parte sórdida del tema, y lo estudiamos de manera objetiva y con mirada científica, es posible que algunos “errores” que cometemos en la cama tengan solución si seguimos los consejos de una porn-star.
Menos preguntar y más observar
No le preguntes todo el tiempo qué tal lo estás haciendo. No estás en tu puesto de trabajo y esperando la valoración de tu supervisor. Estamos de acuerdo en que la comunicación es importante, pero según Joanna Angel (estrella de este tipo de cine) hay que prestar atención a la pareja y cómo él o ella responde a lo que haces.
Nunca tomas el control
Cada pareja adopta un ritmo y preferencias. Pero según Julia Ann, dejar que tu pareja tome las riendas de vez en cuando puede ser un gran estímulo y puede hacer que tu pareja se sienta más deseada - y más sexy.
"Algunas mujeres han sido criadas para creer - conscientemente o subconscientemente - que su pareja deben iniciar el sexo ", dice Julia Ann.
Tomar la iniciativa si nunca lo haces o dejar que lo haga él si siempre inicias tú el juego dará un nuevo enfoque a vuestras relaciones.
No le das importancia a los preliminares
Para algunas personas (especialmente las mujeres) los preliminares son clave para llegar finalmente al orgasmo. Pero para otros (habitualmente los hombres, que llegan más fácilmente a la excitación) los juegos previos son simplemente un medio para un fin. "Para mí, los juegos preliminares me ayudan a excitarme y para que mi cuerpo se involucre, pero la idea de mi pareja preliminar es conseguir que mi vagina esté húmeda para poder tener relaciones sexuales", dice Julia Ann.
No te tomas tu tiempo
Te centras en el sexo y se te olvida practicar todo el juego previo del cortejo, las citas, el coqueteo… Como si una vez que llegas a la cama no fuera necesario. El sexo no es solo la cama, es todo el juego previo.
No amas tu cuerpo y te sientes incómoda con él
El porno no es realista, y los cuerpos reales no son perfectos. El sexo es desordenado, impredecible y a veces simplemente extraño. Si te centras en tus inseguridades no disfrutarás el momento, preocupada por llegar a unos estándares que no son reales.
Tampoco debes aceptar (callar y aguantar) prácticas que te resultan incómodas solo porque “es algo que quiere hacer”. Si algo no te gusta, dilo, del mismo modo que debes contar lo que sí que te gusta.
No haces contacto visual
No le miras a los ojos, no le besas profundamente… Debes estar aquí y ahora, no puedes hacerlo de manera mecánica o por obligación, ni tampoco estar “a lo tuyo” sin pensar en el otro. Las relaciones sexuales más satisfactorias se producen cuando existe conexión.
No le pides sexo oral
La vergüenza y el pudor no sirven de nada en la cama. A menudo hay mujeres que se “conforman” porque él dice que no le gusta practicarles sexo oral (aunque ellos no solo no se niegan a que se lo hagan, sino que hasta lo piden claramente). Guíale si ves que no lo hace con mucha seguridad, pero no aceptes un no. Si es así, cambia de pareja.
