Mercurio se vuelve retrógrado tres o cuatro veces al año. Se denomina así porque parece que el planeta de la comunicación, los viajes y la mente se mueve hacia atrás en su órbita desde nuestro punto de vista aquí en la Tierra. Pero la realidad es que el término Mercurio retrógrado tiene el poder de revolvernos el estómago, mientras hacemos una copia de seguridad de todo lo importante y revisamos tres veces que hayamos enviado el mensaje a la persona correcta.

En los últimos años, Mercurio retrógrado se ha vuelto bastante viral y llevando consigo un tono alarmista. Sin embargo, como planeta del ingenio y la información que es, una de las lecciones que debemos sacar de estas situaciones es que el conocimiento es poder. Entonces, siguiendo el espíritu de este pequeño y complicado cuerpo astral con trabajo de mensajero, vamos a aprender las diferentes fases del ciclo retrógrado y cómo sobrevivir a cada una de ellas. Sí, salir airosa es posible.

Las fases de Mercurio retrógrado

Sombra pre-Mercurio retrógrado

Esta fase de sombra prerretrógrada ocurre cuando Mercurio se mueve sobre los grados del cielo en los que más tarde retrocederá, aparentando que desacelera su ritmo. Lleva consigo una sensación de que ha comenzado Mercurio retrógrado, con incertidumbre en el aire y, a menudo, más intensidad y confusión que durante el retrógrado real. En este momento, debes apuntar muy bien qué personas, temas o tareas tienes a tu alrededor, porque reaparecerán cuando Mercurio retrógrado comience.

Mercurio cambia su dirección a retrógrada

Mercurio convirtiéndose en retrógrado no es otra cosa que la sensación de que ha llegado el tren a la estación. Hay mucho ruido, todos se giran para mirar y la comunicación se detiene bruscamente. Es el momento más dramático de todas las fases de Mercurio retrógrado, ¡pero es que se está preparando para comenzar el viaje de retroceso! Por suerte, esto solo dura un día, así que intenta mantener la calma lo máximo posible.

Mercurio retrógrado

Y llegó la leyenda. Esta es la fase en la que Mercurio parece retroceder en su órbita del cielo y dura unas tres semanas y media. Durante este tiempo, te enfrentarás a interrupciones en las comunicaciones y a retrasos en los viajes. También al regreso de personas del pasado con las que, sin saber por qué, vas a desarrollar una necesidad de enviarlas un mensaje. (Consejo: no lo hagas). Al final, el universo es un reflejo de la vida en la Tierra y, con Mercurio haciendo que todo esté más lento, nuestra mente lo estará de la misma manera.

Mercurio retrógrado en conjunción al Sol

Cuando Mercurio y el Sol forman una conjunción es una de las fases más importantes de Mercurio retrógrado, pero muy a menudo pasada por alto. Para empezar, se marca el punto medio del ciclo retrógrado. Después, es un baño de rayos de Sol para el planeta, donde se refresca y se renueva para dar un poco de esperanza en mitad del viaje. Puedes esperar tener revelaciones, ideas brillantes y algo de claridad en esta época tan confusa.

Mercurio vuelve a circular en sentido directo

Utilizando la metáfora de los trenes, esta fase de Mercurio retrógrado sucede cuando, una vez el vehículo ha realizado su trayectoria marcha atrás, vuelve a la estación y hace una parada. Es entonces cuando podemos bajarnos un momento, tomar el aire, observar a nuestro alrededor y hacer un balance del viaje que acabamos de vivir. Es posible que se revelen los resultados y las lecciones aprendidas en el período retrógrado, eso sí, para bien o para mal.

Sombra posretrógrada de Mercurio

La escena final del ciclo de Mercurio retrógrado sucede cuando, lentamente, el planeta empieza a avanzar a través de la parte del cielo por la que viajó mientras estaba retrógrado. Repite trayectoria, pero aportando una sensación de resaca después de un día de fiesta. Se está un poco atontado aún y reconstruyendo las decisiones que se tomaron la otra noche, aunque con la ayuda de la cafeína para superarlo.

Vía: Cosmopolitan US