Porque hay vida más allá de Des-pa-ci-to y porque ya estamos en pleno verano, los coches, las listas de éxitos y el mundo en general se llena de música. Noches de desenfreno, citas acaloradas... Porque ya lo decían Sonia y Selena: "Cuando llega el calor, los chicos se enamoran". Para ayudarte en tus citas, para ligar, para que suba la temperatura, toma papel y lápiz y ponte a descargar canciones. Este es el TOP 5 más caliente de Cosmopolitan.
1. Felices los cuatro, de Maluma.
Es uno de los himnos veraniegos, y no solo porque nos haga bailar, si no porque su letra es más calentita que la playa de Gandía. "Vamo' a ser feli, vamo' a ser feli', felices los cuatro... Y arreglamo' el cuarto...". Es cierto que cualquier canción de reggaetón sube ya de por sí la temperatura pero es que las letras no requieren de un análisis porque no hay sutileza. Maluma es sexy, y la idea de ser felices los cuatro nos hace eso... Felices.
2. Wild Thoughts, de DJ Khaled, Bryson Tiller feat. Rihanna.
Es una canción que tiene rollo, es sexy, hace bailar pero no de forma excesiva. Según el Dj Kinsman -pseudónimo de Juan Carlos Pariente, director artístico de No Blitz Family-, quien va a pinchar este verano en el rooftop de Casa Suecia en Madrid: "Es una remezcla de la canción María María de Santana, con ritmos de R&B comercial -que está muy de moda ahora-y la letra está versionada por Rihanna. Además, teniendo a Rihanna, tiene que ser sexy". La letra, por supuesto, ya lo dice todo.
3. Mi Gente, J Balvin y Willy William.
Es una de las últimas canciones de reggaetón que ha salido al mercado y sin duda, ya hace mover caderas por todos los continentes. Además de la trabajada letra reggaetonera y explícita de J Balvin -ironía, claro- hay pequeños detalles en francés que le dan un toque tremendamente sexy: Ma chèrie, la la la la la... Porque, ¿hay algo más atractivo que alguien hablando en francés? Kinsman también está de acuerdo: "Es reggaetón, tiene toques de dancehall y J Balvin todo lo que toca lo convierte en éxito".
Cada vez que suena esta canción hay un clamor popular. El desamor -cantado de forma tan desgarrada- es sensual, y nos imaginamos a Danny Ocean cantando y sufriendo por ese amor: "Y ya no puedo girl, ya no puedo girl". Y al escucharla, es imposible no bailar, darlo todo y cantar el estribillo: "Me rehúso a darte un último beso a así que guárdalo, para que la próxima vez te lo de haciéndolo... Haciéndotelo así, así, así... Así como te gusta, baby". Ojo al minuto 2.34 de la canción.
Y Silvia Lorente, de Cosmopolitan -que ha bailado también esta canción conmigo-, opina lo mismo: "Me rehúso me parece una canción poderosa, de esas que "te canto para que sepas que ahora me das igual, chaval, pero cuando vuelvas, TE VAS A ENTERAR". Entonces es perfecta para ponértela de fondo en cualquier situación, desde en el coche para grabar 'stories' (cuando vas de copiloto) para que él los vea, hasta en la intimidad de la ducha (la alcachofa como micrófono, claro)". También queremos que nos lo hagan así, así, así.
"Mala mujer, mala mujer... Me han dejado cicatrices por todo mi cuerpo tus uñas de gel". Afrobeat y reggaetón en una misma canción donde el ritmo te hace mover el cuerpo hasta destrozar las pistas de baile. Y no solo las pistas de baile. Explica Kinsman: "El baile que se asocia al reggaetón es sexy, estás pegadito y moviendo la cadera". Por lo que este último tema de C. Tangana lo tiene absolutamente todo. El soniquete de esta canción -Silvia Lorente dixit- es sexy. ¿Has subido ya la temperatura, digo, el volumen?
Paloma Herce es periodista y publicista, experta en moda, estilo de vida y todo lo que tenga que ver con ser una bon vivant desde hace 10 años. Graduada en Periodismo y Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad CEU San Pablo, ha estudiado el Máster de Radio de la Cadena COPE y el curso de Estilismo y Personal Shopper de Condé Nast College. Empezó escribiendo de moda, de verdad, en Harper’s Bazaar, y después ha continuado en revistas como Cosmopolitan o TELVA. Tiene una newsletter que utiliza a modo de diario y un consultorio de invitadas en el que da tips sobre elegancia. Su filosofía de vida, y de trabajo, se basa en una frase de Diana Vreeland que dice ‘the eye has to travel’. Y ella lo hace viajando, leyendo, viendo películas y disfrutando de exposiciones
