1. La más cara es la mejor
¿Por qué? Si los ingredientes más básicos como la glicerina o los humectantes no lo son. Estos ingredientes ayudan a retener el agua y sus beneficios sobre las capas de la piel son mayores de lo que los científicos pensaban.

2. Aplicarla con la piel seca
Lo mejor es aplicarla cuando aún conserva un puntito de humedad, justo el estado en el que se encuentra después de haberla limpiado. Si la tuya está muy seca, aplica antes de tu crema una toalla húmeda durante un rato (entre 15 minutos y una hora). Pero no lo hagas más de una vez a la semana.

3. No usarla por los granos
Está demostrado que la piel acnéica tiene falta de ceramidas, vamos que, cuando hay acné se retiene menos agua que habitualmente. Los estudios han demostrado que un uso tópico (con indicaciones médicas) de una hidratante adecuada, puede mejorar enteros el estado de tu piel.