Hace más de diez años la veíamos en Al salir de clase con un aspecto de "niña buena", y hoy es una mujer cañón que vive en Australia con Thor (el guapérrimo Chris Hemsworth). Sin duda, Elsa Pataky es una de esas mujeres que sabe sacarse partido y sortear muy bien el paso de los años. Y uno de sus grandes aliados ha sido el deporte.

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"Elsa ha sido siempre muy fit, pero sobre todo su actitud es inmejorable. Hay dos tipos de persona: las que hacen las cosas por obligación y las que les gusta. A ella le encanta moverse, lo necesita", nos cuenta Fernando Sartorius (@fitsartorius), el entrenador personal que la actriz conserva desde hace más de una década, y junto con el que ha sacado su último libro, Desafío Max (La Esfera de los Libros).

Está claro que tras su tonificado cuerpo hay una gran capacidad de esfuerzo y mucha constancia detrás pero, ¿quieres saber cuál es su mejor secreto? Dominar al dedillo los ejercicios básicos: flexiones, sentadillas y abdominales. "Son las sumas y las restas del fitness", dice Fernando. Saber hacer estos movimientos de manera correcta te darán la base que necesitas para ser eficaz con todo lo demás. "Antes de pasar a ejercicios más complicados como el yoga o el pilates, hay que saber hacer bien una flexión", ejemplifica el entrenador. Solo así el ejercicio tendrá el efecto más óptimo. "¿Quién crees que puede hacer mejor yoga, quien tenga la técnica o quien no la tenga?", reflexiona el experto. Desde luego, Elsa ya demostró que podía hacerlo de maravilla en El Hormiguero el pasado mes de abril.

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Los tres movimientos básicos de Elsa

1. La flexión. "Elsa viaja mucho y antes de salir del hotel hace dos o tres series con flexiones, es el movimiento rey de la parte superior del cuerpo", nos cuenta Fernando.
Cómo: Colócate boca abajo, con los hombros paralelos y las manos a la anchura de los hombros, los brazos ligeramente flexionados a la vez que sientes tensión en los pectorales. Los pies levemente separados entre sí. Mantén desde la cabeza a los pies una línea recta, y mira al frente.
Ya estás lista para empezar a hacer el movimiento: desciende hasta rozar el suelo con el pecho y vuelve a la posición inicial. Y si no puedes, flexiona las rodillas en el suelo (es una variación de lo más inteligente).
Cuánto: para empezar, haz 10 flexiones, descanso de 2 minutos y vuelta a hacer 10 flexiones. Si notas que estás ejercitando pectorales, hombros y tríceps, es buena señal.

2. La sentadilla. "Y este es el movimiento rey para tonificar la parte inferior del cuerpo", confiesa Fernando. "Ella también lo realiza en el hotel, es un ejercicio que igualmente tú lo puedes realizar en casa", dice.
Cómo: apoya tus manos en el respaldo de una silla, separa los pies más allá de la altura de los hombros, colócalos hacia atrás, y mantén la mirada recta. Desciende hasta ponerte en cuclillas hasta que los glúteos pasen la altura de tus rodillas.
Cuánto: Primera serie con 20 repeticiones, segunda serie con 15 y última serie con 10. "Según vayas cogiendo fuerza, puedes usar peso", aconseja el entrenador.

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3. Los abdominales. "Tienen miles de variaciones pero las preferidas de Elsa son las elevaciones de tronco", nos chiva Fernando. ¡Imítala!
Cómo: Acostada boca arriba, las rodillas flexionadas, los pies en el suelo y las manos detrás de la cabeza. Inspira y eleva el tronco encorvando la espalda. Espira al final del movimiento, y regresa a la posición inicial esta vez sin apoyar el tronco en el suelo.
Cuánto: Repite hasta que empieces a notar una sensación de quemazón en el abdomen.

Subir siempre escaleras, ir andando a muchos lugares y no perder de vista la tonificación ("las mujeres muchas veces se olvidan de ella, y es fundamental", apunta Fernando), son otras costumbres que Elsa ha hecho propias y que le ayudan a mantenerse. "Además de ser una experta de los movimientos básicos, hay que decir que el estilo de vida de Elsa es propicio a ser de lo más sano. En su cocina seguro que hay pesas, ¡vive con Thor!", bromea Fernando.

Y una cosa más: "Para tener su éxito, no puedes querer su cuerpo, ni medirte por la báscula sino por tu progreso. Si no puedes hacer una flexión pero a las dos semanas de entrenar puedes hacer cinco, eso es un gran logro. No hay que obsesionarse con perder, hay que preocuparse por ganar tonificación, autoestima: cuando ganas de lo bueno, perderás de lo malo", concluye el entrenador.

¡A por ello!

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Amaya Lacarra

Tras una década escribiendo y entrevistando sobre viajes, cultura y gastronomía en distintas revistas femeninas, ahora dirige el equipo digital de Cosmopolitan. A su especialidad del buen comer o del buen hacer en cualquier recoveco del mundo, ahora se suma la gestión de otros campos como la moda, la belleza o las ‘celebrities’. Adicta al chocolate y a su Navarra natal, estudió Humanidades y Comunicación en la Universidad de Deusto, además de cursar un Máster Oficial de Periodismo de Investigación en la Universidad Complutense de Madrid.