En 2023 se batió el récord de despidos en España con más de 991.000 notificados a la Seguridad Social, un 22% más que el año anterior, pero si algo hemos descubierto de la mano de las redes sociales es que si bien es cierto que antes la gente sentía cierta vergüenza por haber sido despedida, empleando eufemismos para hablar de lo sucedido e incluso mintiendo al respecto, ahora las nuevas generaciones comienzan a presumir sus despidos.

Muchos alegan que gracias a lo acontecido, pueden enfrentarse a un nuevo capítulo laboral en el que poder ser valorados de nuevo e incluso poner en marcha habilidades que hasta entonces, su trabajo anterior no les habían permitido explorar. Incluso en plataformas como Linkedin se trabaja para eliminar el estigma que en tantas ocasiones acompaña a los despidos. Así lo explica Rosario Sierra, directora de negocio corporativo de LinkedIn España y Portugal, que indica que estamos asistiendo a un claro cambio en la mentalidad de los profesionales, donde superar desafíos laborales se percibe como una experiencia más y como parte del crecimiento y de la evolución laboral natural.

"En LinkedIn llevamos tiempo trabajando por eliminar el estigma asociado al despido"

“En LinkedIn llevamos tiempo trabajando por eliminar este estigma y que los reclutadores normalicen estas pausas en las trayectorias de los profesionales, evitando juzgarlos por ellas. En este sentido, por ejemplo, incluimos hace unos años la posibilidad de que los miembros añadan en su perfil los parones laborales por causas personales como el cuidado de los hijos y de terceras personas, formación, voluntariado o año sabático, permitiéndoles así mostrar su resiliencia y compartir las lecciones aprendidas de esas experiencias”, indica Sierra, que comenta que en Linkedin se ha introducido el marco de foto #Open To Work, que permite a los miembros indicar a reclutadores y a la comunidad que están abiertos a nuevas oportunidades laborales.

"Al fomentar un diálogo sobre el desempleo, cada experiencia será un capítulo de crecimiento"

Los beneficios de esta modalidad han quedado claros, pues quienes lo utilizan tienen un 40% más de probabilidades de recibir mensajes de reclutadores, y un 20% más de probabilidades de recibir mensajes de la comunidad de LinkedIn. “En los últimos días he visto cómo varios miembros han estado adoptando este marco y creando una cadena de publicaciones para acabar con el estigma. Y es que sólo con herramientas como estas y fomentando un diálogo abierto sobre el desempleo seremos capaces de construir un ambiente donde cada experiencia laboral, incluso la más desafiante, se convierta en un capítulo de crecimiento personal, auto descubrimiento y en posibilidades de explorar oportunidades laborales más diversas y enriquecedoras”, comenta a ‘Cosmopolitan’.

Por su parte Amira Bueno, directora de Recursos Humanos de Cigna Healthcare, coincide en señalar que antes, el despido solía acarrear un estigma social abrumador, asociado con el fracaso personal y la vergüenza profesional, una percepción que está cambiando gradualmente. Cada vez más personas están adoptando una actitud de resiliencia y transparencia en torno al despido, compartiendo sus experiencias con otros trabajadores que se encuentran, o podrían llegar encontrarse, en la misma situación.

El despido se ve como una oportunidad para el crecimiento y la exploración de oportunidades



“Este cambio de percepción puede atribuirse a varios factores, como la evolución del mercado laboral hacia una mayor flexibilidad y emprendimiento, donde el despido pasa a ser visto como una oportunidad para el crecimiento y la exploración de nuevas oportunidades. Además, la transparencia en las redes sociales permite a las personas compartir sus altibajos profesionales de manera abierta, promoviendo una cultura de aprendizaje, apoyo mutuo y de concienciación con la salud mental”, explica.

El 62 % de los profesionales españoles se plantean cambiar de trabajo en 2024

Los datos de Linkedin hablan por sí solos: el 62% de los profesionales españoles se plantean cambiar de trabajo en 2024, lo que supone un aumento del 15% respecto a 2023, unas cifras que expresan que muchas personas, lejos de resignarse, están dispuestas a tomar medidas para mejorar su situación laboral y perseguir una trayectoria que se alinee mejor con sus objetivos y valores. Esto pasa por buscar roles que tengan un salario más alto (36%) y un mayor equilibrio entre la vida laboral y personal (28%), además del interés de encontrar nuevas oportunidades de crecimiento (19%) o trabajar con gente nueva (14%).

“Al final, cada transición y cada parón laboral se convierte en una valiosa oportunidad para ampliar horizontes y pararnos a reflexionar sobre lo que queremos para nuestro futuro laboral, ya sea trazar nuevas metas, enfocarnos en nuestras pasiones o dar forma a una trayectoria completamente diferente. Asimismo, si añadimos nuestra interrupción profesional en el perfil, como la maternidad, podemos resaltar las habilidades que adquirimos durante ese período, como puede ser la adaptabilidad, la empatía o la comunicación. Cada una de estas experiencias personales es lo que nos hace únicos, y lo que hace que el talento que aportemos tenga un valor incalculable”, dice Rosario Sierra.

De TikTok al departamento de recursos humanos

En TikTok hay ya un nuevo microgénero: el de los vídeos sobre despidos en los que los usuarios hablan de cómo han perdido sus trabajos en un ejercicio que en ocasiones supone la búsqueda de apoyo, en otras, de reírse de lo ocurrido y en otros casos, poner en marcha quejas en las que expresar presuntas irregularidades. Hay quienes reciben ofertas de trabajo a raíz de estos vídeos, e incluso hay usuarios que reciben consejos procedentes de expertos en contratación para asesorarles acerca de cuáles serían los siguientes pasos a poner en marcha para encontrar una nueva perspectiva laboral. Antes el despido se ocultaba; ahora, se emplea para alcanzar la exposición y la viralidad.

El despido no se considera necesariamente un obstáculo insuperable en un proceso de contratación

Sin embargo, al hablar de los despidos, nos plantamos una duda: los expertos de recursos humanos, al ver que alguien ha sido despedido, ¿lo verán como una ‘red flag’? Amira Bueno explica que bien un perfil al que hayan despedido puede plantear algunas señales de alerta, no necesariamente se tiene que interpretar como un indicador definitivo de un problema potencial. Lo relevante es la forma en la que el candidato comunica las razones detrás del despido y cómo demuestra su capacidad para aprender y crecer a partir de la experiencia. “No se suele evaluar de la misma manera un despido fruto de una reestructuración empresarial o de factores externos fuera del control del candidato, que uno consecuencia de un bajo desempeño o problemas de conducta. Igualmente, más allá del despido en sí, el historial laboral del candidato y las referencias de empleos anteriores también se tienen en cuenta para evaluar su perfil”, asegura. Por ello, si el candidato muestra una actitud positiva, cuenta con un historial laboral sólido y demuestra tener capacidad para aprender de las experiencias pasadas, el despido no se considera necesariamente un obstáculo insuperable en un proceso de contratación.

En resumidas cuentas, hemos de tener en mente que el despido puede ser una oportunidad para explorar nuevas industrias, roles o modelos de trabajo, pues lejos de ser necesariamente un final, puede ser el comienzo de algo nuevo.