Tienes que aceptarlo: se acaba el verano y, con él tus vacaciones, que entre comidas, actividades y transportes han dejado tus bolsillos tiritando. Ahora mismo lo último en lo que quieres pensar es en seguir gastando, ¿verdad? No te preocupes, que vamos a darte unos cuantos consejos para ayudarte a ahorrar sin darte cuenta y que tu 'vuelta a cole' no se te haga cuesta arriba.

Con la fuerte subida de precios que estamos viviendo, entendemos que es difícil ahorrar. ¿Sabías que cuatro de cada diez jóvenes de entre 18 y 24 años no consigue ahorrar ni cien euros al mes? Así se desprende del estudio 'Hábitos de consumo de los españoles de 2022' de Rastreator, que revela también que siete de cada diez españoles están preocupados por sus ahorros y el 66% no consigue ahorrar la cantidad que le gustaría.

Lo cierto es que, como dice el estudio, las personas de entre 25 y 34 años son las que más dinero pueden permitirse ahorrar y uno de cada diez incluso almacena hasta 500 euros al mes. Si no estás en ese caso (cosa que entendemos porque ser disciplinado con el dinero es muy difícil) y se te hace cuesta arriba el ahorro, sigue al pie de la letra esta guía con trucos para que tus bolsillos no sufran en el nuevo curso.

1. Ponte un objetivo y fija prioridades

Una buena idea a la hora de intentar ahorrar lo máximo posible es ponerte un objetivo mensual. Decide cuánto dinero quieres ahorrar cada mes y respeta ese compromiso. Póntelo fácil: programa una transferencia automática a principios de mes, cuando te ingresen la nómina, que envíe esa cantidad de dinero a tu cuenta de ahorro. Así, si no ves el dinero no querrás gastarlo.

Otro consejo útil es diferenciar entre gastos fijos (el alquiler o la cuota de la hipoteca, la luz, el móvil, internet...) y variables (gasto en compras, ocio, viajes, cultura, regalos...). Algunos gastos serán inevitables, pero otros no, por lo que debes priorizar lo necesario sobre lo accesorio. Seguro que en tus gastos variables hay espacio para recortar, como dando de baja alguna suscripción que no utilices mucho. Si te apasiona una serie de una plataforma, quizás puedes darte de alta un mes y de baja en cuanto la hayas terminado en lugar de suscribirte para siempre.

2. Compara precios

Es posible que estés pagando más por cosas que podrían costarte menos y esto aplica a muchas cosas que pagas a diario y no te das ni cuenta. Igual estás haciendo la compra en un supermercado más caro solamente porque te pilla más cerca de casa o estás pagando una cuota de telefonía cara porque te incluye servicios que no utilizas. La clave está en comparar precios.

Si quieres ahorrar, puedes hacer un repaso a todos los servicios que tienes contratados, como la luz, el gas, el móvil, internet... y compararlos con los de otros compañías para ver si estás pagando de más o no. Y en el primer caso no dudes en cambiarte de proveedor. Lo mismo con la compra del supermercado: compara precios entre varios para ver si puedes ahorrar. Aunque al principio te parezca que las cantidades que ahorras son muy bajas, verás como a largo plazo lo acabas notando.

3. Intenta batir a la inflación invirtiendo

Sabemos que en este momento no vas a encontrar precios especialmente bajos. La inflación se situó en julio en el 10,8%, marcando récords de los últimos treinta años, así que además de intentar pagar lo menos posible por los servicios que utilizas una buena idea es empezar a invertir. Lo cierto es que rentabilizar tu dinero es la única vía posible para evitar que se devalúe con la inflación. Con esta guía de cómo invertir para principiantes te será mucho más sencillo lanzarte al mundo de la inversión o hacerte broker.

4. Exprime las ofertas y los descuentos

Las ofertas, las promociones y los descuentos van a ser tus mejores aliados para una 'vuelta al cole' sin sobresaltos financieros. Y esto puedes aplicarlo a cualquier ámbito de tu gasto. Por ejemplo, si necesitas ropa, pásate por la sección de 'special prices' de Zara o aprovecha las 'mid season sales' del resto de tiendas.

Si lo que necesitas es ahorrar en la cesta de la compra, busca en el supermercado aquellos productos que llevan una etiqueta especial con un descuento porque van a caducar pronto. Algunos comercios, incluso, juntan todos estos productos en una misma estantería, poniéndotelo aún más fácil. O recurre a aplicaciones diseñadas para evitar el desperdicio, como Too Good To Go, en las que a muy buen precio podrás hacerte con una bolsa de la compra de un supermercado o un par de raciones de un restaurante.

Si vas a viajar en pleno otoño, puedes recurrir a aplicaciones de gangas, como Viajeros Piratas, Busco un chollo o Trotamundos. Además, frecuentemente las aerolíneas lanzan promociones de vuelos para algunos destinos, así que pásate por sus webs de vez en cuando.

5. Ábrete a las compras de segunda mano

Aprovecha los chollos que puedes encontrar en tiendas de segunda mano o vintage, como Vinted o Micolet, donde se ofertan cada día miles de prendas a buenos precios… y eso que algunas están nuevas. Así no solamente conseguirás ahorrar, sino que colaborarás a crear un mundo más sostenible.

6. Deja descansar a tu coche y pásate al transporte público

Tener coche es una fuente inagotable de gastos. El seguro, el mantenimiento, la gasolina (que ahora está por las nubes)... Igual es momento de que dejes a tu coche descansar un tiempo y recurras al transporte público para ir a trabajar. Con un abono transporte y dejando el coche en casa puedes ahorrar mucho, pues todos los gastos de tu vehículo al año se cifran en miles de euros.

Y, si no tienes coche, también puedes ahorrar en transporte. Una buena idea es intentar recurrir al transporte público en lugar de ir a todas partes en taxi o en coche privado. Perderás más tiempo, sí, pero ten en cuenta que cada viaje te costará únicamente entre uno y dos euros. El ahorro es considerable.

7. Apúntate los gastos y vigila tu ahorro

Otro truco útil para ahorrar es ser consciente de lo que gastas. Y para ello no hay nada mejor que apuntar todos tus gastos. Puedes hacerlo en un excel, en un cuaderno o de notas o en aplicaciones para ahorrar como Mint o Monefy. Así podrás ver las diferencias entre lo que gastas y lo que ingresas, ¡seguro que te sorprende ver lo que desembolsas en ciertas cosas!

Y, muy importante, incorpora el ahorro a tu presupuesto. Cada mes, cuando te llegue la nómina, destina una cantidad directamente al ahorro, cuenta con ello desde el principio. Seguro que te resultan útiles estas ideas de cómo crearte un plan financiero para cumplir con este propósito. Como decíamos antes, una buena idea es programar una transferencia automática los primeros días de mes, de forma que ya no cuentes con ese dinero en tu cuenta de gastos.

8. Recurre al ocio gratuito

Seamos sinceras: no necesitas gastarte grandes cantidades de dinero para entretenerte. Tienes a tu disposición muchas opciones de ocio gratuito a las que puedes recurrir para ahorrar dinero. Exposiciones sin coste, conciertos al aire libre, bibliotecas, plataformas de series y películas gratuitas… Hay mucha cultura a tu alrededor por la que no tendrás que pagar nada. ¡Aprovéchala! Y, por supuesto, no pierdas de vista los descuentos. Por ejemplo, el Teatro Real de Madrid ofrece periódicamente promociones y, además, dispone de precios especiales para los jóvenes.

9. Planifica con tiempo

La planificación y el orden van a ser otros grandes aliados en tu plan para ahorrar en la vuelta de las vacaciones. Por ejemplo, reservar billetes o alojamientos con tiempo te puede servir para encontrar promociones y descuentos. Pero ser planificada te puede ayudar más. Si sabes que vas a tener un gasto grande dentro de algunos meses (de cualquier importe, por ejemplo, unas vacaciones, la celebración de tu cumpleaños, comprarte un coche…) una buena idea es ir reservando mes a mes algo de dinero para que cuando llegue el momento el desembolso no te duela tanto. Además, si cada mes eres consciente de que debes destinar parte de tu dinero a ese futuro gasto evitarás gastarlo a lo loco, así que también ahorrarás.

10. Do it yourself!

Hacerte las uñas en un centro de estética es mucho más cómodo que en casa, lo sabemos. Pero si sacas un poco de tiempo y lo haces tú misma puedes ahorrar bastante. Y así con todo. Ábrete a intentar arreglar las cosas que se te estropean en casa por ti misma, verás que en internet hay miles de trucos y vídeos explicativos sobre cómo realizar pequeños arreglos en casa. Otra buena idea para ahorrar es cocinar en casa y no comer fuera todos los días, así como prepararte tú misma la fruta del almuerzo y no comprarla preparada en el supermercado. Somos conscientes de que requiere tiempo y esfuerzo, pero te permitirá ahorrar mucho… y lo realizada que te sentirás después no tiene precio.