• Guía para introvertidas en el trabajo

Llegó el momento. Tras no pocas incertidumbres y un largo proceso de selección, por fin has conseguido un puesto de trabajo. Sí, la primera parte del objetivo está cumplida. Pero ahora toca enfrentarse a nuevos retos. ¿El más inmediato? Mostrar tu mejor faceta y confirmar que eres la persona adecuada para la tarea que te han encargado. No pierdas ni un instante en demostrarlo: esos primeros días pueden llegar a pesar como una losa si no das los pasos adecuados.

Primera impresión

Esfuérzate desde el principio en dejar bien claras cuáles son tus capacidades profesionales... y las personales. Es decir, “tus valores, amabilidad, cercanía y capacidad de adaptación”, como apunta Elena Arnaiz Ecker, psicóloga especializada en talento, desarrollo profesional y marca personal (elenaarnaiz.es). Así que saca la mejor de tus sonrisas, pero procura también mostrar humildad y capacidad de escucha.

Dudas razonables

No te sientas un bicho raro si te asaltan mil y una preguntas sobre cómo hacer tu trabajo. Es lo normal. Lo mejor es expresarlas con naturalidad, según recomienda Arnaiz: “No es necesario que centres el mensaje en que tú no sabes hacerlo, pon el énfasis en averiguar cuál es su forma habitual de proceder”.

Errores inevitables

Demasiadas veces pecamos de ser poco transparentes a la hora de reconocer cuándo nos equivocamos. ¿Cuestión cultural, tal vez? Sea cual sea la causa, quizá logres superarlo si asumes que “a menudo en el error se encuentra un componente fundamental del componente fundamental del proceso de aprendizaje”, como advierte la psicóloga.

Trato con el jefe

La situación que más se teme. Y pese a esto, no es cuestión de dejar de dormir preparando ese momento. Procura dedicar un rato a ordenar tus ideas. Como consejo, sé clara, amable y «basa tus feedbacks en comportamientos y no en tu valoración sobre las personas», comenta Elena Arnaiz Ecker.

Pausa obligada

No hace falta demostrar que trabajas más que nadie comiendo en tiempo récord y delante del ordenador. «La creatividad y el rendimiento aumentan cuando haces los descansos necesarios», recuerda la experta. Además, si te relacionas con tus compañeros, tu productividad sale ganando.

Cierta iniciativa

Sí, se espera de ti algo proactividad, pero lo mejor es que vaya acompañada de una dosis de modestia, como comenta Elisa Agudo, experta en el área de cambio cultural y transformación de negocio: “Respeta lo que se hacía y a las personas que ya estaban antes, pero innovando algún detalle”.

Memoria a prueba

Debes esforzarte en aprenderte tus funciones… y también el nombre de tus compañeros. Para ello, Agudo, autora del libro Bendito lunes: Diario de una pandemia (en Kindle) aconseja usar algún truco mnemotécnico, como «imaginar situaciones lo más absurdas posibles con las palabras clave de la lista a recordar».

Vida personal

¿Hasta dónde compartir datos con tus compañeros? Arnaiz sugiere determinar si la información es sobre tu vida personal o privada, y preguntarte estos aspectos claves: “¿aporta algún valor contar este tipo de cosas de mi rutina presente y pasada? ¿Me va a ayudar a conseguir los retos? ¿Lo hacen los demás?”.

El ’smartphone

Según un estudio de Kasperky Lab, rendimos un 26% más teniendo lejos el móvil, aunque los expertos no recomiendan privar de esta herramienta a los empleados. ¿Qué tal si, como sugiere Arnaiz, desactivas tus notificaciones y configuras tu teléfono para que sólo te suenen las llamadas urgentes?

Fondo de armario

Seguramente quieres mostrar una buenísima imagen desde el primer día, pero recuerda que “es importante que tu forma de vestir se adecúe a la cultura de la organización”, indica Elena Arnaiz Ecker. Es probable que dicha imagen se cuelgue en la web o las redes sociales de la compañía. Investiga.

Buen rollo en remoto

¿Cómo es posible mantener una buena sintonía con tus compañeros cuando, debido al teletrabajo, ni los ves? Elisa Agudo da algunas pautas.

Queda ‘online’

Cerveza y Zoom el viernes a última hora? Por qué no. “Siempre puede ser interesante compartir con otros tus inquietudes”, asegura.

Deja que te vean

La experta recomienda que enciendas la cámara: “Compartir tu sonrisa sin mascarilla es fundamental para fortalecer los lazos”.

Crea comunidad

Arrima el hombro. “Hoy en día todo el mundo está más receptivo con el hecho de poder subsistir y crecer como empresa”.