No tiene que ver con fechas de entrega, abultadas agendas de clientes… ¡ni siquiera con cómo hablas! ¿Te rindes? ¡Es cómo te mueves! Utiliza el lenguaje corporal para conseguir lo que quieras en el trabajo.

1. Triunfa en las reuniones
Cómo conseguirlo: primero, elige sitio: sentarte cerca de tu jefa hará que conectéis mejor. La postura al sentarte también tiene importancia: hazlo siempre en la parte delantera del asiento porque eso da la imagen de que estás alerta y controlando. Nunca cruces los brazos sobre el regazo, parecerá que te pones a la defensiva o tienes miedo de algo. Si debes hacer una presentación, cruza la mirada con los asistentes y no la bajes jamás o expresarás inseguridad y acuérdate de mirar a tu jefe de vez en cuando para darle la sensación de que trabajáis en equip.

2. Haz que todos digan "sí"
Cómo conseguirlo: si quieres que tu compañero de curro acceda a hacerte un favor, levanta la mano con la palma hacia arriba. Es el gesto que hacen los policías durante los interrogatorios para persuadir a la persona de que haga lo que quieren. Luego coloca la mano sobre el corazón, como si indicaras que estás pidiendo algo importante para ti. Si quieres cerrar el trato, haz una pausa de unos segundos antes de decir las palabras clave, como “sé que todos estamos a tope pero (pausa) ¿podrías cubrir mi turno?". Ese breve silecio le da un sutil tono de orden, propiciando que diga “sí”.

3. Ciérrale la boca a una compañera plasta
Cómo conseguirlo: mientras te habla, fija la mirada en lo que sea que estés haciendo y realiza con la mano un gesto que se llama “el cañón de la pistola” (es decir, juntando los índices de ambas manos). Apoya el “cañon” en los labios haciéndole saber que no quieres hablar. Si no lo pilla, di algo neutral como “tengo muchísimo trabajo”.

4. Superar un error
Cómo conseguirlo: vale, has metido la pata pero ¡tiene solución!. Cuando vayas a hablar con tu jefe para contárselo, colócate a un metro de distancia de él. Es una posición de no enfrentamiento que hará que él, subconscientemente, quiera dar carpetazo a tu error. No está de más que le reafirmes con un “no volverá a ocurrir en el futuro”.

5. Enfréntate a la más chunga de la ofi
Cómo conseguirlo: mírala directamente a los ojos, con la cabeza recta (inclinarla hacia un lado indica que buscas aprobación) y levanta un poco la barbilla. Esa postura transmite seguridad en ti misma porque miras desde arriba. Si quieres incidir aún más en que no tragas su actitud, haz con la mano un gesto de rechazo colocando la palma hacia abajo.

6. Vencer a un rival
Cómo conseguirlo: acércate a su mesa a hablar con él, agáchate y apoya el brazo sobre la mesa. ¿Para qué? Para imponerte “conquistando” un territorio que es suyo. De esa manera, te impones como la más fuerte y transmites que puedes conseguir lo que quieres.