- Pareja y salud mental: cómo manejar con trucos de experta
- Empatía: qué es y cuáles son los mejores ejercicios para entrenarla
- Cómo ayudar a una amiga que padece depresión
Confiesa: ¿cuántas veces te has visto a ti misma imaginando un escenario idílico con alguien a quien estás conociendo? O si estás en pareja: ¿te ha traicionado tu mente haciéndote creer que has sido engañada con alguna cuestión y no puedes parar de darle vueltas?
Sea una cosa y otra, a lo que nos referimos es a ese tipo de pensamientos que suelen perseguir durante todo el día y que se adelantan a acontecimientos que no existen, pero se perciben tan reales que, incluso a veces, pueden desencadenar cuadros de estrés o ansiedad, así como impulsos que no tienen sentido. Estos 'bucles' tienen nombre, y aquí hemos venido a desgranarlos para que puedas ser un poco más consciente de cuándo se dan y cómo puedes evitarlos, porque no te hacen nada bien, sobre todo, en tus relaciones sexoafectivas.
La psicóloga y directora clínica Patricia Zori, arranca contando: "Cuando sufrimos ansiedad o malestar emocional, nuestra mente trata de buscar alternativas de solución, formas de 'autotratamiento' ante nuestro dolor emocional. Eso es la reflexividad improductiva. Tratamos de resolver lo que nos ocurre sobrepensando, rumiando, en lugar de tratar de encontrar qué necesitamos realmente y dirigir nuestra acción a cubrir dicha necesidad. Si extrapolamos esto a las relaciones personales o de pareja, son muchas las situaciones que pueden tocar heridas pasadas y desencadenar síntomas psicológicos que reflejan necesidades no cubiertas en el pasado, que nos lleven también a tratar de controlar la situación. Esa necesidad de control, lleva a imaginar y sobrepensar en las posibilidades, generando, por ejemplo ansiedad, vergüenza e inseguridad".
CUANDO LOS PENSAMIENTOS IMPRODUCTIVOS PROYECTAN ESCENARIOS QUE NO EXISTEN CON UNA PERSONA
Aplicados en el contexto de conocer a una persona y relacionados con los escenarios que podemos imaginar con ella, puede suponer un problema. "Cuando resulta inevitable tener este tipo de pensamientos, se pueden desencadenar algunas conductas que no nos hacen bien con la otra persona. Los pensamientos improductivos, si están centrados en la idealización de una persona, pueden conducir también a una actitud muy tóxica ante la realidad" – cuenta la doctora Caroline West, experta en sexo y relaciones de la 'app' Bumble–. "Las redes sociales han proporcionado a muchos de nosotros un lenguaje totalmente nuevo para hablar de las citas y las relaciones, y nos han ayudado a poner nombre a sentimientos y experiencias que todos compartimos, pero que no necesariamente somos capaces de articular. Por ejemplo, las 'beige flags', las 'situationships' y ahora, las 'delusionships'".
Y continúa: "'Delusionship' es un término que hace referencia a un flechazo inicial, muy fuerte, cuando has conectado con alguien pero todavía no os conocéis. Habla del enamoramiento idealizado que sientes por alguien con quien no tienes una relación establecida, por ejemplo, alguien con quien hablas mucho en tu entorno de trabajo o alguien con quien has hecho 'match' en una aplicación de citas, pero con quien aún no has quedado. Si en esos contextos conoces un poco más a la persona, pero tiendes a imaginarte más escenarios 'idílicos' de los que vives, probablemente te desilusiones, o peor: acabes exigiendo implícita o explícitamente a la persona cuestiones que no corresponden, como más atención, por poner un ejemplo".
CÓMO FRENAR LOS PENSAMIENTOS IMPRODUCTIVOS CUANDO NOS HACEN DAÑO
Si te has sentido identificada o te resuena lo que hablamos, West arroja luz: "Está bien soñar despierta con personas y relaciones potenciales, al fin y al cabo, las ilusiones no son intrínsecamente negativas. Por ejemplo, pueden aportar confianza en ti misma y ayudarte a reconocer el valor que aportas dentro de una relación romántica. Pero sí es necesario mantener los pies en el suelo, porque puede ser muy fácil dejarse llevar por la idealización de una relación o de nuestras interacciones con otra persona. La diferencia es que tú vas un paso más allá y empiezas a idealizar tu vida con esa persona, o sus rasgos de personalidad, antes de llegar a conocer su versión real y auténtica, y ahí es donde entra en juego la parte del 'autoengaño' y las expectativas, mejor ser consciente cuando llegan y evitarlos, en la medida de lo posible". 'Pss': no te pierdas los mejores consejos de psicólogo: 7 mujeres ‘millennials’ nos cuentan los que han aprendido en su terapia.
Desde la plataforma de entrenamiento mental y emocional 'Psicología', para aprender evitarlos (y que más tarde no haga falta poner tanto empeño, porque ya te saldrá solo), recomiendan:
- Escribe sobre ellos. "Pon en un par de líneas qué es lo que imaginas y por qué es importante para ti". ¿Qué buscas imaginando eso? ¿Cubres alguna necesidad más profunda?
- Reflexiona. "Analiza qué estarías dispuesta a hacer para lograr que ese escenario sea real". No imagines tanto y pasa a la acción, si hay algo concreto que quieres, ¿cómo puedes conseguirlo?
- Pon límites. "Ten claros cuáles son tus límites para identificar que, si no estás cómoda ni feliz, no vas a conseguir lo que te hace bien". Si pasas a la acción, pero no te sientes como esperabas, quizás tu lugar no esté ahí, ¿para qué "estirar el chicle" si esa situación no te hace bien? Mira por ti.
"A veces, la mejor forma de combatir esto es tratar de dirigir nuestra atención al cuerpo en lugar del pensamiento" –añade Zori–. "Preguntarse qué es lo que se remueve dentro, qué duele, cuál es el miedo, qué necesitas hacer realmente para cubrir esa necesidad. También, comunicar a la otra persona cómo nos sentimos (si procede) y mostrarnos vulnerables, podrá ayudar a encontrar un entendimiento y a que la otra parte vea cómo nos sentimos realmente, y pueda ayudarnos a manejar la situación", concluye.
Silvia Lorente es experta en 'celebrities', estilo de vida y sexualidad y especializada en cultura pop 'millennial' y colectivo LGBT+. Se licenció en Periodismo en la URJC de Madrid, estudió un módulo de doblaje y tiene más de 10 años de experiencia en el manejo de plataformas digitales y redes sociales (escribió y ganó premios con su blog de moda y 'celebrities', 'La Otra Horma del Zapato', y coordinó el equipo de moda y belleza en el departamento digital de la agencia Globally durante dos años). Después, colaboró con InStyle, Harper's Bazaar y GQ, y genera contenido para Cosmopolitan desde 2015. En sus ratos libres, estudia un máster de DJ profesional y echa las cartas del Tarot a quien tiene dudas sobre su futuro. 'Psss': Si te apetece jugar con ella al Trivial de 'Friends', 'Sexo en Nueva York' u 'Operación Triunfo 1', has de saber que tienes las de perder.
